La injusticia de la tracción a sangre. Cerrada

El uso de caballos y burros para carga en la ciudad de Santiago del Estero, presenta una situación de desigualdad. Tanto para los animales, como para el que conduce. 

Nuestra provincia ha crecido, la cantidad de vehículos ha aumentado y la circulación de estos vehículos de tracción a sangre, forma parte de nuestro paisaje. Un paisaje desgarrador, ya que hablamos de una provincia donde la temperatura en verano asciende a 50 grados. Utilizar estos animales para tirar un carro, los coloca en una situación de maltrato, sufrimiento y vulnerabilidad, desde el punto de vista físico y psicológico, por el estrés que implica. Los caballos son animales que perciben las emociones humanas y por ende, el nerviosismo, enojo y la agresividad.

Del otro lado de la moneda está el conductor. Está sometido a una situación de segregación social, a un trabajo insalubre y se encuentra en situación de desprotección social. Se trata de personas con falta de oportunidad que dependen de su trabajo de cartonero o recolector de basura para subsistir. 

Es importante trabajar para alcanzar una forma de vida digna. Estoy pidiendo que los representantes políticos de esta ciudad, que se encuentra en pleno proceso de crecimiento, se ocupen de encarar esta problemática, a través : proyectos y leyes que resignifiquen y sistematicen el trabajo de los cartoneros que hacen uso de tracción a sangre; propuestas de toma de conciencia ecológica, para lograr la participación barrial y ciudadana; liberación, atención médica y reubicación de los caballos para devolverles su dignidad.

Te pido que me ayudes a lograr este cambio. Esta situación es sólo la punta de un ovillo que tiene un enorme trasfondo social que debe ser solucionado de fondo.