Prohíban el Espantoso Festival de Yulin Cerrada

En el pueblo chino de Yulin capturan animales aún estando con sus dueños. Los mismos son torturados como no puede imaginar la mente humana y cocinados vivos porque aseguran que su carne tiene mayor sabor cuanto más sufre el animal.

Solo un clamor global puede lograr que ​el Gobierno chino  prohíba la tortura y el consumo humano de animales domésticos.

Solo las voces de cientos de miles de personas en todo el mundo pueden detener semejante crueldad y proteger a indefensos animales.

Solo el sentimiento universal de piedad, misericordia y justicia puede frenar el sufrimiento, el dolor, la angustia y la muerte de tantos seres vivientes como son los animales.

Solo los demás países y los hombres y mujeres que los conforman, pueden marcar un alto al sufrimiento de los miles de perros y gatos salvajemente torturados y sacrificados en el festival de Yulin.

Actuemos unidos para proteger a los animales de Yulin, porque su existencia forma parte también de la creación, y la creación merece en su integridad nuestro respeto.

Alcemos nuestra voz de repudio ante el Gobierno de China por el sacrificio inaceptable de tantas vidas de animales y pidamos la prohibición de esa práctica despiadada que ​denigra la dignidad del ser humano.

No estamos solos en nuestra lucha. Personalidades de ayer y hoy están con nosotros.

Mahatma Gandhi decía: “La grandeza de una nación y su progreso moral pueden ser juzgados por la manera en que ellos tratan a sus animales”. Y agregaba: “el progreso espiritual requiere que en algún momento dejemos de matar a nuestras criaturas hermanas para la satisfacción de nuestros deseos corporales.”